27 Jun
27Jun


 CIUDAD DE MÉXICO.  

- En un emotivo regreso que honra la tradición, el orgullo y el alma de la Charrería Capitalina, la figura de la Reina de la Unión de Asociaciones de Charros de la Ciudad de México resurge con fuerza y gracia, encarnada en la joven Sandra Viñuela Moreno, quien será coronada en una ceremonia que promete ser tan simbólica como entrañable. 


Este acontecimiento no sólo marca el retorno de una representación tan significativa para nuestra cultura charra, sino que también pone en alto la historia de una joven que ha crecido entre lienzos, riendas y valores profundamente arraigados en la tradición ecuestre mexicana. 

Ver a Sandra convertirse en soberana es testimonio vivo de lo que la charrería, con apoyo de su familia, puede lograr: generaciones comprometidas con el legado, el deporte y el orgullo nacional. Sandra proviene de una estirpe charra admirable. 


Es hija de la señora Sandra Moreno de Viñuela, experimentada amazona de escaramuza, con una gran tradición familiar, y del señor Jesús Edgar Viñuela Navarro, charro apasionado y defensor de nuestra cultura. Con el ejemplo de su hermana Paulina, reconocida jinete en la cala de caballo, escaramuza charra y ex reina de la Asociación de Charros “Carlos Rincón Gallardo”; Sandra ha crecido entre retos, triunfos y el firme deseo de representar con dignidad a la mujer charra. 

Su coronación como Reina de la Unión de Asociaciones de Charros del Distrito Federal —hoy Ciudad de México— tendrá lugar precisamente en esa casa que la vio crecer: la Asociación de Charros Carlos Rincón Gallardo, presidida por el Ing. 


Rubén Estrada Vera, sin olvidar la grata presencia de SGM Megan I, como soberana anfitriona. 

Cabe destacar que la figura de la Reina Capitalina se había ausentado durante algunos años, dado que la Reina Nacional representaba también a la charrería de la Ciudad de México desde la sede de la Federación Mexicana de Charrería, en el corazón de la capital. 


Por ello, este regreso tiene un valor especial: es símbolo de renovación, esperanza y pertenencia.

 La actual administración de la Unión, encabezada por el Máster Jalil Eduardo Dulac Camacho y su Consejo Directivo, ha apostado por un proyecto que acerca la charrería a la infancia, inspirando desde el juego con la reata hasta el sueño de portar un traje de charra o charro con orgullo. 


Sandra Viñuela, comprometida con la noble responsabilidad que ahora le corresponde, será una digna embajadora de este esfuerzo. 


A todas las niñas que miran desde las gradas con ojos brillantes a las escaramuzas; a los niños que en patios de tierra giran su lazo con la ilusión de algún día ser grandes charros… a todas y todos ellos les decimos: la charrería vive, crece y se renueva con ustedes. Porque mientras exista una niña con el sueño de ser Reina Charra y un niño que juegue a florear, nuestro deporte nacional, no morirá.