Ordoñez Ahora en Oaxaca

 *“Que no se pierdan las tradiciones: MDOB

*Totalmente Arropado en la Asamblea Estatal

*Oaxaqueños, disiparon dudas e inquietudes

Marcos Domingo Ordoñez Buendía, precandidato a la presidencia de la Federación Mexicana de Charrería, este martes estuvo, en Oaxaca, donde fue recibido por los representantes del Deporte Nacional de ese estado del país.
En Asamblea General Estatal, Marcos Ordoñez, fue arropado por la charrería, a invitación expresa del presidente de la Unión, Federico Sada Bolaños Cacho.

Marcos, inició su interlocución, agradeciendo la invitación y sin chistar, añadió que: “Me nace la inquietud de competir por la presidencia de nuestro máximo organismo charro federado, para tener una igualdad de condiciones, no podemos ser charros de cada cuatro años”.

Señaló que todos los cambios de reglamento, de estatutos, deben ser por votación, no por imposición. Los equipos “AA” y tradicionales, son la mayoría,
“Quiero recopilar las ideas para hacer grande nuestra Federación, nosotros debemos hacernos valer”, remarcó el tabasqueño.

Se está perdiendo la esencia de la charrería, el arte, la cultura, las buenas costumbres. Nuestra tradición se está “contaminando” y los jóvenes desconocen mucho de lo que en realidad es nuestra esencia.

Ordoñez Buendía, puso el ejemplo de Aguascalientes: “Ahí se inició buscando al municipio, de ahí al gobierno del estado y posteriormente los llevó al Senado de la República, ahora ya tiene esos dineros etiquetados, aunque no es mucho, pero, ya es un buen comienzo”, señaló Marcos Ordoñez.

En otro orden de ideas, se tocó el tema de los seguros para los competidores, a lo Ordoñez Buendía señaló, que: “Estamos viendo un par de aseguradoras, que espero sean mejor que los que nos han estado ofreciendo”, destacó.

“La Federación está para servir al charro, no para servirse del charro. No les voy a quedar mal, quiero que la charrería crezca. La mujer tendrá un lugar preponderante, así como los niños y jóvenes, que son el futuro charro”, señaló.

¡Por la Charrería que nos Merecemos, Marcos Va!